La Barcelona botiflera y Artur Mas.

Y el premio a la mayor cagada histórica del año es para… la Generalitat de Cataluña. Al molt honorable no se le ha ocurrido otra cosa que felicitar la Navidad con una postal de carácter bélico, por supuesto de la Guerra de Sucesión, una guerra de hace trecientos años entre las monarquías europeas que a la gente con dos dedos de frente le importa un bledo y si no van a cenar patatas igual. A parte de que asustar a los niños con guerras el día de Navidad es un detalle de muy mal gusto parece que han equivocado el año y el contexto. Resulta que el grabado militar no es de 1714 sino de 1705 cuando una Barcelona fiel a los Borbones fue bombardeada y rendida por los ingleses aliados con la oligarquía rural de Vic. En fin, el tiro por la culata para la historia que venden los separatistas. Pero sirva para conocer que Barcelona era botiflera y que solo las bombas pudieron cambiarlo. Mas información aquí.